sueño con hormigas

En el púlpito nubloso del recinto a veces beato, la hormiga sacerdote apretaba sus mandíbulas y con dos de sus patas, se sostenía el peso insalubre de la barriga hinchada pero siempre santificada...
Caín y Abel... cigarra y hormiga... domesticados o indómitos... sumisos o insurrectos... aceptados y rehuidos... gloriosos y proscriptos... Y otra vez el círculo inacabable y el periplo zigzagueante de la vida obediente o de la obediencia debida... de... vida.

Y no quiero ser una hormiga. Insecto himenóptero, prolija, social, orgánica, simétrica, estoica, persistente, laboriosa, engarzada... Ni soldado, ni obrera, ni larva, ni exploradora, ni reina. Ni siquiera hormiga voladora, alas de disfraz para engañar a otras, para engañarse a sí misma... Volar es otra cosa. Se puede volar sin alas y sin paracaídas y llegar mas alto...

La saciedad del hormiguero me empalaga.
El sendero marcado me estanca.
La contención de la muchedumbre me agota.
No soy bicho de colonia y entonces siempre al margen, me va como me va...

Por eso estaba pensando...

seguir así.

rojAmheL

4 comentarios

[rojA - 27 de julio de 2004 - 23:31]

decir y sentir, en éste caso.... son sinónimos de una palabra, Mitogén: "soledad"... a la que ya casi quiero como a una hermana.
Gracias por lo bello.

[Mitogén - 27 de julio de 2004 - 01:10]

Te va como te va...
¿Cómo te va?
Ojalá te vaya como nos va en el alma cuando te leemos,delicia de los decires (y los sentires).

[Zoroastros - 19 de julio de 2004 - 13:25]

Me gusto mucho el tono de cuento, de como desde la inocencia se llega a ver lo salvajemente alienante que es la realidad en la que vivimos. Muy bueno

[dik - 17 de julio de 2004 - 20:49]

asias por la bienvenida y otra vez, mu bonito!. Yo paso de ser hormiga tambien, pero cigarra komo ke tampoko, igual mas polilla ke otra kosa..
A seguir asi, karpe diem!